Viajé.

Había tempestad.
Un mar de corazones rotos, la tormenta de decepciones......tantas decepciones y confianzas rotas.
En cada puerto encontraba desilusión, sombras que obscurecían las almas errantes.
Y cada historia se repetía como eco en todos los bares, cantinas y tabernas, una y otra vez el mismo cuento. Todo parecía irreal, como una trampa, una conspiración que se iba tejiendo y extendiendo por todos los rincones.
Aún hay algo más....
Aún siento un palpitar.....aún puedo ver dentro de tus ojos.....aún siento que vale la pena adentrarse hasta la perdición.....esa perdición que los dos conocemos bien.
La sed de venganza, el rencor, el odio.....son cosas que ya no anhelaba, que me sobraban.....todo quedo atrás...
Hoy me era necesario buscarte, saberte afuera me envalentonaba a naufragar, perderme en una expedición eterna.
Elegí querer, a una musa o un recuerdo o solo un invento......te elegí a ti.